Los compromisos de género del Congreso 2016 de la UICN aprovechan los esfuerzos activos realizados para alcanzar la igualdad de género desde la década de 1980. Estos esfuerzos han generado productos de conocimiento pioneros e impactos en las políticas a nivel mundial y a nivel nacional en decenas de países.
Photo: Shutterstock / Muellek JosefLa UICN reconoce que la igualdad de género es un motor para alcanzar soluciones ambientales sostenibles, justas y eficaces. Desde 1984, las cuestiones de género y los temas relacionados con la mujer han sido prioritarios para numerosas decisiones de las Asambleas de Miembros y los Congresos Mundiales de la Naturaleza de la UICN.
Durante el Congreso de 1996 de la UICN, se adoptó el mandato de crear un programa y una política de género para la Unión. En 1998, la Unión aprobó y adoptó la política de equidad e igualdad de género en la que las consideraciones de género fueron declaradas parte integral del trabajo de la UICN.
El que la UICN reconociera la importancia de la igualdad de género llevó a establecer la Oficina Mundial de Género (GGO) y reunir uno de los mayores y más diversos grupos de expertos sobre género de todas las organizaciones ambientales. El trabajo de género de la UICN ha sido reconocido en las más altas esferas de negociación, incluyendo el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, los convenios de las Naciones Unidas sobre cambio climático, biodiversidad y desertificación, así como en la conferencia RIO+20.
Decenas de países, incluyendo Brasil, Zambia, México, Ruanda y Uganda, han invitado a la Oficina Mundial de Género de la UICN a facilitar procesos de integración de la perspectiva de género en todos los sectores ambientales claves. El apoyo y las metodologías de la UICN han sido mencionados en las Contribuciones Nacionales de Desarrollo Previstas (INDC) que Liberia, Perú y Jordania presentaron a la Convención sobre cambio climático.
El Congreso de 2012 de la UICN adoptó numerosas resoluciones para abordar las cuestiones de género. Una de ellas en particular hacía un llamado a adoptar una perspectiva de género en la promoción de la adaptación basada en ecosistemas, un enfoque novedoso para aumentar la resiliencia y reducir la vulnerabilidad de las personas y el ambiente ante el cambio climático.
Desde entonces, la UICN ha dado apoyo a gobiernos y otros actores interesados de diversos países y regiones, incluyendo Mozambique, Jordania, Egipto, Haití, Tanzania, Panamá, Nepal, Liberia, Bangladesh, Cuba, Ghana, Uganda, Camerún, Perú y Zambia, para crear Planes de Acción de Género para el cambio climático (ccGAPs). Estos planes reconocen e integran las experiencias, conocimientos, valores, necesidades y capacidades, tanto de las mujeres como de los hombres, en las estrategias nacionales y los programas de adaptación y mitigación del cambio climático.
El Congreso de 2016 de la UICN tiene el propósito de ser el de mayor perspectiva de género en la historia de la UICN. Cumplirá con los estándares de la Política de Género de la Unión así como con los numerosos mandatos adoptados por las Asambleas Generales de la UICN. La Estrategia de Integración de Género del Congreso de la UICN fue creada para garantizar que las políticas y acciones de la UICN reflejen la importancia de la igualdad de género en todo el trabajo de la Unión.
