Desde hace 22 años, el proyecto conjunto de Veracel y Stora Enso en Brasil ha estado plantando árboles de especies nativas en los bosques tropicales locales, dentro del marco del Programa para el Bosque Tropical Atlántico.
Photo: Stora EnsoDesde hace 22 años, el proyecto conjunto de Veracel y Stora Enso en Brasil ha estado plantando árboles de especies nativas en los bosques tropicales locales, dentro del marco del Programa para el Bosque Tropical Atlántico.
El objetivo es la restauración de más de 5000 hectáreas de bosque tropical atlántico, y el establecimiento de corredores ecológicos. Estos corredores ayudan a mantener la biodiversidad, al permitir a plantas y animales desplazarse y propagarse naturalmente, en lugar de estar confinados a parches aislados de bosques tropicales remanentes. Esto es particularmente importante para animales de presa como venados, monos y armadillos, que necesitan la protección de la vegetación natural del bosque tropical.
Veracel ha avanzado mucho desde que plantó las primeras 207 estacas de especies nativas en 1994. La primavera pasada, se alcanzó una meta importante, ya que se han plantado más de cuatro millones de árboles dentro del marco del programa. Esto equivale a 5695 hectáreas de bosques tropicales renovados, ubicados en las municipalidades de Belmonte, Eunápolis, Itabela, Itagimirim, Porto Seguro y Santa Cruz Cabrália, al sur de Bahía.
Una doble misión: proteger y restaurar
Veracel es propietaria de cerca de 215.000 hectáreas de tierra en Bahía. La mitad del área consiste en tierras degradadas que habían sido usadas anteriormente para pastoreo de ganado y en las que Veracel ha sembrado árboles de eucalipto. La otra mitad está dedicada a diferentes tipos de conservación del bosque tropical, tales como la protección de los hábitats de bosque tropical existentes y la restauración activa de los bosques degradados. Veracel nunca hace talas en áreas de bosque tropical natural.
Un ejemplo de la protección del bosque tropical es la Estación de la Reserva Privada de Patrimonio Natural Veracel, utilizada únicamente con fines educativos y de investigación. Hace falta un trabajo de restauración más activo en bosques tropicales dañados que no van a volver a sus condiciones naturales sin ayuda. Veracel y sus asociados generalmente siembran unas 80 estacas de árboles nativos por hectárea en estas áreas, cubriendo un total de 400 hectáreas al año.
“Cada año, antes de empezar el proceso de restauración, evaluamos las imágenes de satélite y buscamos zonas de pastos o áreas que están en etapa temprana de regeneración y que podrían ser restauradas para conectar fragmentos del bosque tropical atlántico remanente,” explica Humberto Amoedo, experto de Veracel en planificación de bosques tropicales.
A la hora de elegir nuevos sitios para restaurar, un factor decisivo es la oportunidad de crear dichos corredores ecológicos. El objetivo corresponde a las recomendaciones del Corredor Central del Atlántico y de Conservation International. Las 5695 hectáreas de bosques tropicales que han sido restauradas hasta ahora han permitido conectar más de 65.000 pequeños fragmentos aislados de bosques tropicales con áreas mucho mayores de bosque tropical atlántico en las tierras boscosas que posee Veracel al sur de Bahía. Ésta es una excelente noticia para los armadillos y otras criaturas, que esperan poder ampliar su rango.
